¿Qué tal estás? Espero que fenomenal 👌.

Cuando quiero desconectar, me gusta escuchar música. Reconozco que soy un enamorado de la música de Marcos Vidal. Cada canción es un tratado teológico que invita a la reflexión.

Uno de los aspectos en los que debo esforzarme más es en la oración y, sobre todo, en la intercesión. Precisamente, escuchando la música de una de sus
canciones (de hace ya unos años…) me di cuenta de la importancia de interceder por el lugar en el que nos ha tocado vivir. Además, me hizo pensar en el papel que
estoy teniendo como creyente para con mi entorno. Esta es la letra de la canción que se titula “Una misma visión”:

“Somos pequeñas llamas, prendidas porque un día
fueron traídas a tu luz eterna que nos dio vida.
Por unos pocos que no amaron sus vidas más que a Ti.
Hoy estamos aquí y nuestra antorcha brilla.
Hoy estamos aquí.
Una misma visión para un nuevo siglo.
Una generación que levanta a Cristo
y se une en oración clamando por España.
Nuestras posesiones, nuestros corazones
pertenecen al Señor de señores.
No importa el precio, salva nuestra España.
Las barcas y las redes hoy listas están”.

Yo soy de la generación X, producto del baby boom 👶, tú de la generación Z. Pero más allá de la denominación, lo realmente importante es lo que como generación podamos hacer por la obra de Dios.

Te animo a reflexionar sobre la manera en la que puedes ser luz y bendición a quienes te rodean, les conozcas o no. No te conformes solo con creer en Dios.

Una manera, más importante de lo que creemos, de trabajar para la obra de Dios es orar e interceder por el lugar en el Dios nos ha puesto 🙌. ¡Oremos por nuestra
tierra!

Ánimo y disfruta. 💪 💪

¿Estás orando por el lugar en el que Dios te ha puesto?
¿Oras por tu instituto o facultad, tu ciudad o tu país?

³⁵ Jesús recorría todos los pueblos y aldeas enseñando en las sinagogas judías. Anunciaba la buena noticia del Reino y curaba toda clase de enfermedades y dolencias. ³⁶ Y al ver a toda aquella gente, se sentía conmovido porque estaban maltrechos y desalentados, como ovejas sin pastor. ³⁷ Dijo entonces a sus discípulos:

— La mies es mucha, pero son pocos los trabajadores. ³⁸ Por eso, pedidle al dueño de la mies que mande trabajadores a su mies.