DÍA 115

Buenos días,

Hemos oído, más de una vez, que al igual que necesitamos comer o hidratarnos para tener una buena salud física, precisamos de la Palabra de Dios y la oración para mantener una buena salud espiritual. Es una afirmación totalmente cierta.

No obstante, el propósito de la Palabra de Dios, de la Biblia, no es solo proporcionarnos conocimientos a través de los cuales conocer la voluntad de Dios para nuestras vidas o la manera en la que debemos comportarnos. El objetivo principal y el fin último de la Palabra de Dios es la obediencia.

En Santiago 1:22 se nos insta a obedecer la Palabra de Dios de la siguiente manera: “No os contentéis sólo escuchar la palabra, pues así os engañáis a vosotros mismos. Llevadla a la práctica”.

No te engañes, todas las bendiciones que Dios nos promete no son fruto de la lectura de unas palabras, sino de la obediencia a su Palabra. Para obedecer, primero hay que conocer; pero el hecho de conocer no implica obedecer.

Te animo a leer la Palabra de Dios y, lo que es más importante, a ser obediente a la misma.

¡¡Muchísimo ánimo!! 💪 💪

¿Conoces u obedeces la Palabra de Dios? ¿Qué diferencia encuentras?

LECTURA DEL DÍA

22 Pero se trata de que pongáis en práctica esa palabra y no simplemente que la oigáis, engañándoos a vosotros mismos.

Santiago 1:22

Adaptado del whatsapp del 8 de marzo de 2021.