¡Un nuevo día!

Hoy quiero hablarte de otro fruto del Espíritu que tiene que ver también con nuestra relación con otras personas. Es la paciencia. Supone soportar, sin rencor, conductas poco agradables e incluso ofensivas para nosotros. Pero también tener ánimo en los momentos difíciles que vivimos, esperar y mantener la fidelidad.

No se trata de resignación. Jesús es el modelo de paciencia. Romanos 15:5 afirma “Pero el Dios de la paciencia y de la consolación os dé entre vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús”.

Tienes al Espíritu Santo y al ejemplo de Jesús en la tierra para poder poner en práctica la paciencia en este día, independientemente de con quién te relaciones o la situación que estés viviendo. ¡Aprovechémoslo!

¡¡A por el día de hoy!! 💪 💪

¿En qué situaciones pierdes la paciencia y cómo el Espíritu Santo te puede ayudar?

⁵ Ojalá que Dios, la fuente de la constancia y del consuelo, os conceda vivir en mutua armonía, según el ejemplo de Cristo